l
¿Qué es lo vivido,
en qué poro ha quedado
en qué ráfaga?
Puente a la oscuridad
o la pendiente veloz
de una sonrisa
que se apaga,
pero también calor
en medio de la sombra,
acomodo
de criaturas que buscan
suavemente
su modo de dormir
mientras una ventana
se va cerrando hacia el
oriente
y la luz de la tarde
se unta silenciosa.
Todo está bien:
no mintieron los rostros
de las cosas,
sólo sabían brillar
en su secreta forma de
caer,
sólo sabían decir:
es así, es así,
mientras acrecentaban su
caída,
se hacían ovillo,
y en su acomodo hablaban
en voz baja
de lo que hubieran querido
ser.
Bajo la forma gris de las
cenizas
cuántos tonos de rojo,
cuántas lenguas
se quieren desatar
para arder;
cuántas columnas de aire
que gozaron de peso y
consistencia
en su día,
sostienen el papel
de seda
para envolver
fantasmas,
que aún tosen suavemente
para no
desaparecer.
(De ¿Qué es lo vivido?)
© Dolores Castro
© Carmen Amato
No hay comentarios:
Publicar un comentario