La poeta Dolores Castro Varela, ha dedicado parte de su vida literaria a estudiar a fondo la
obra del bardo jerezano Ramón López Velarde. Recibirá el Premio Iberoamericano
de poesía de manos del Gobernador
del Estado, Miguel A. Reyes, el
próximo 19 de Junio, en la ciudad de Jerez, el premio se revitaliza con la
presencia de una mujer que ha fincado sus raíces en esta tierra. Ha publicado
sobre el genio creador de López
Velarde y sobre su obra,
que como bien afirma la propia Dolores Castro, rescata el valor de la provincia
donde reside el verdadero México.
A continuación
presentamos un extracto de la entrevista que realizara la también poeta
Guadalupe Dávalos en su casa del Distrito Federal, con motivo de la grabación
de un video donde realizó una semblanza de su obra para el Coloquio Dolores
Castro, que se llevó a cabo recientemente en el Museo Felguérez.
¿Cómo ha sido tu relación con López
Velarde?
A López Velarde, lo conocí desde que estaba yo en
preparatoria. Y siendo como soy en el fondo de mí provinciana lo primero que me
cayó como una especie de lluvia benéfica fue que hablara de lo provincial y de
Zacatecas. En la preparatoria Rosario Castellanos hablaba de Comitán, y yo de
Zacatecas y de López Velarde fue lo que empezó a hacer más estrecha nuestra
amistad, desde luego, las dos lo admirábamos, también el maestro que nos daba
clase, pero yo más. Más tarde tuve un jerezano ilustre que fue mi jefe en el Seguro
Social, el licenciado Ramón Félix de la Torre y este licenciado adora a López
Velarde también y resulta que empecé a trabajar con él, y supe que había hecho
el calendario que agrupaba a todos
los que habían hecho algo sobre la poesía de este genio de la poesía
zacatecana. Ramón Félix de la Torre acrecentó mi amor por López Velarde, que ya
existía. Entonces fui varias veces a Jerez a hablar sobre López Velarde, porque
cada vez he podido aquilatar con mayor justeza lo que es la poesía de este gran
zacatecano. No solamente porque hable de la amada provincia que él y yo amamos,
sino que descubre tantos secretos del género humano, del hombre religioso, pero
que tiene a la vez una forma muy completa de ser, que no solamente es religioso, y amoroso de todas las formas
del amor y sobre todo cómo es una persona completa cuando ama, cuando teme,
cuando descubre, cuando siente, eso y más es López Velarde. Yo he leído de
López Velarde naturalmente toda su obra, y tanto me emociona su poesía como sus
ensayos. En sus ensayos “el soltero que es un tigre que da vueltas en una
jaula”… y luego que ese soltero renunció a tener hijos por su obra maestra que
es no tener hijos, dice él mismo, pero uno de los maestros de la universidad
zacatecana me dijo; Sí, pero su obra maestra es no tener hijos, porque está
haciendo una obra maestra.
La Suave
patria es un poema verdaderamente revelador: “el niño Dios te escrituró un
establo y los veneros de petróleo el diablo” y considerar la patria no como un
discurso, en un heroico acto, sino
como algo íntimo, como algo tan íntimo y necesario como la propia infancia,
como la propia vida, como la propia madre, me parece que ese poema y el otro
que es un verdadero poema aunque sea un ensayo, pero que para mí es un poema y
se titula: Novedad de la patria, en novedad
de la patria yo hice un descubrimiento cuando dice: “las dos formas de destruir
el amor son el odio y el descuido”. Ramón López Velarde es en prosa y en poesía un gran poeta. Sus
ensayos son en prosa, dicen que son ensayos, son verdaderos poemas. Mi mayor
pecado, cuando habla de esa muchacha, de esa forma tan verdadera, es una íntima
verdad que confiesa, el valor para decir eso.
¿Y la casa, que te dice cómo te sientes
cuando entras a la casa del viejo pozo, qué es para ti?
¡Ay! Fue una emoción muy grande, porque hace muchos que yo
fui, y tenía hasta unas pinturas con las que acabaron desgraciadamente de
aquella, pero sobre todo ver el pozo, de ese poema que es uno de los más
hermosos poemas de López Velarde, y ver el patio, y cada una de las piezas donde él estuvo. Luego alguien por
ahí dijo que esa no era la casa de
López Velarde, que era del abuelo, si era la casa del abuelo, pero él hay vivió
y también la mamá y hay fotos donde ahí lo presentan.
¿Hay fotos donde Ruíz Cortines en
cierta visita que tuvo a Jerez, se queda imantado, en aquellos años cuando se
propuso visitar esa casa, y quizá rescatarla y ahora se ha estado remodelando
se le ha hecho una cocina más bonita y le han puesto aromas, y después de salir
¿qué pasa? ¿Cómo llega la poesía, cómo fluye en Lola Castro, como asciende?
Yo siento que se acumulan atardeceres, paisajes y que lo veo
como vivo, soñador todavía sin la desilusión de la mujer última de los guantes
negros, sino todavía con Fuensanta, inocente en su regazo y enamorado ya. No
cabe duda San Pablo tenía razón, el amor en este mundo, es lo más importante.
Es lo que le da a nuestros sentidos esa tela luminosa para ver las cosas, de manera de que pueda uno no estar
pensando en todos los oprobios que la gente hizo contra nosotros sino
disculpando los errores, amando de veras a la gente, tratando de, ni odiar, ni
ser descuidado, ver las cosas como son, pero como son verdaderamente, no con
unos ojos descuidados, sino con unos ojos que puedan penetrar a una realidad
más onda, a un fondo en donde siempre la sensibilidad, se encuentra con la
inteligencia.
Háblame de los Zacatecanos, de tu gente.
Siempre he admirado la voluntad zacatecana, la amé en mi
abuela, en mi padre y en mí madre y en todos los zacatecanos que conozco y amo.
Y esa voluntad, y el recuerdo de esa voluntad, y del paisaje y de las personas
muertas ya, que además dos de ellas me dieron vida, hace que tenga yo de
Zacatecas una raíz inamovible de amor a la tierra, a la gente, a su literatura,
a sus poetas, sobre todo a López Velarde, y a mis amigos de siempre
© Enviado por Ma. Elena Leal
Nota: Las dos fotos originales de esta nota no pudieron ser subidas al blog por lo que se sustituyeron con una foto de Carmen Amato.
© Enviado por Ma. Elena Leal
Nota: Las dos fotos originales de esta nota no pudieron ser subidas al blog por lo que se sustituyeron con una foto de Carmen Amato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario